Un usuario de la empresa Rayo de Plata que cubre el trayecto comprendido entre Corral de Bustos y Río Cuarto, denunció ante la prensa que días atrás salieron desde la terminal de esta última ciudad con el parabrisas pegado con cinta adhesiva.
“Yo iba hacia Pascanas. Cuando subí, me senté en el primer asiento del piso de arriba, y veo que el parabrisas estaba rajado y pegado con cinta. Cuando empezamos a viajar la presión del aire empezó a empujar el parabrisas. Con las demás personas que veníamos en los primeros asientos, tuvimos que salir porque se veía que en cualquier momento se rompía. Unos diez minutos más tarde explotó”.
Y agregó: “Sin importarle mucho al chofer, seguimos viajando sin el parabrisas y con lluvia hasta llegar a la localidad de Bengolea, donde tuvimos que esperar un refuerzo que venga desde Río Cuarto”.
Pero la película de terror no concluyó allí: “Para completarla, cuando retomamos el viaje, este nuevo colectivo parecía un colador. Llovía en el interior prácticamente igual que afuera. La verdad que ya estamos hartos de que nos lleven como animales sin importarles nada”, concluyó el usuario.
En definitiva, esta no deja de ser una nueva barbaridad, pues días atrás hubo que lamentar una víctima fatal cuando un joven de Bengolea que se bajó de la unidad que estaba detenida al lado de la ruta (cuando debió ingresar a la localidad) fue embestido por un camión al intentar cruzar la calzada.
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